Ruta Gastronomica 01/04

Autor PepeManu

Si hoy íbamos de “penitencia” a Fuendetodos hoy era jueves santo y viceversa ; lógicamente con una ruta tan exigente procedía el correspondiente almuerzo reponedor. Y ahí es donde intervengo yo con la crónica gastronómica.

Desde hace años vamos al bar Casino donde nos acomodan en la planta de arriba, en una o varias mesas al lado de la ventana. El lugar es un sitio limpio, con cierto toque de modernidad y muy soleado.
La pega llega con el servicio, el dueño no es excesivamente amable ni predispuesto; en ocasiones da la impresión de que casi le molesta que hayamos elegido su establecimiento para almorzar. El servicio es lento y hay que estar continuamente solicitando lo que falta (vino, gaseosa, pan,…) lo que además parecía enojar al camarero-dueño.

En otro orden de cosas apuntar que las raciones son normales, ni grandes ni pequeñas, y merece destacarse lo bien hechos que están los huevos fritos, con puntillas y sin que chorreen en aceite, muy buenos. También han sacado unas bandejas de patatas fritas prefabricadas y sin terminar de freir.

Con los cafés-carajillos, aparte el orujo al que ha invitado un cumpleañero, el almuerzo ha subido a 8,50 euros por cabeza. Teniendo en cuenta que uno o dos comensales han pedido un simple bocadillo, el precio cobrado nos parece desorbitado. Así pues, y en resumen, buena o muy buena calidad, raciones aceptables pero precio muy alto, lo que, a mi juicio, representa una relación calidad/precio muy baja o desfavorable en comparación con otros establecimientos en los que hemos almorzado.

Ahora, lo hemos pasado de miedo con una ruta exigente, con un ambiente y camaradería, como siempre, extraordinaria, y un día – vientecillo final aparte- de buen deporte (94,7 kms ha contabilizado mi particular cuenta).

Con penitencias así yo me apuntaría todos los días, ¿verdad?